lunes, octubre 23, 2006

Papel Tornasol


Esa mañana fue diferente a las demás, se baño con agua fría y no desayuno, contrario a lo habitual. Al llegar a clase, noto la presencia de una niña en especial, se encontraba en la esquina derecha junto a un gran ventanal, solitaria y pareciendo estar acongojada.
Durante toda la clase no pudo evitar dejar de mirarla y despertó una gran inquietud ante un hecho que le impacto, la niña no había dejado de sollozar durante este lapso tiempo.

Pregunto a su alrededor tratando de hallar las posibles causas del llanto de aquella niña, cuya presencia realmente no había notado antes, pero no hallo respuesta alguna.
Decidió seguirla y observarla desde una distancia prudente, haber si lograba deducir algo que le permitiera entender más a fondo esta extraña situación. Una vez más termino el día agotado, pero sin ninguna idea que le permitiera descifrar su enigma.

Pasaban las semanas y la intriga era cada vez más grande y de tanto detallarla, empezó a despertar una extraña sensación, deliraba cada vez que la observaba, la acariciaba a distancia, soñaba con sus pupilas...en definitiva, se convirtió en su hecho principal.
En una tarde de abril ya con el corazón en la mano y sin tener la menor idea a cerca de la procedencia de sus lágrimas, decidió acercarse y plantearle aquel cuestionamiento que atormentaba su cabeza desde hace un par de meses. Con la sutileza del caso toco su hombro derecho y ella muy amablemente giro su torso con la finalidad de quedar frente a él.

Toda la tarde estuvieron conversando y comentando sin número de historias, hasta llegar al centro o motivo de dicha conversación - ¿Cual es el motivo de tu constante llanto, realmente no entiendo y desconozco la razón de tus lágrimas? - pregunto con un tono de seriedad, mientras ella con un gesto amable comunico - Mis lagrimas siempre están influenciadas por cada una de mis emociones, haciendo que el matiz principal de cada una de estas sea diferente dependiendo de su procedencia. Desde hace mucho tiempo me he dedicado a llorar y observar los pigmentos cristalinos que conforman cada gota de emoción, como cariñosamente he denominado las lagrimas y así mismo he llegado a obtener una clasificación de estas según sea la emoción que las produzca - con el asombro del caso y mientras cerraba la boca exclamo - es que acaso las lagrimas no son transparentes, es decir que según tu análisis, hay varios colores de lagrimas? -, vislumbrando una sonrisa amable prosiguió - las veces que he llorado de alegría, mis lagrimas se tornan amarillas, cuando estoy demasiado triste se vislumbran de un tono violeta al igual que cuando las relaciono con la muerte, si son grises, son lagrimas de pereza, el sosiego y la plenitud las hacen ver naranjas, la impotencia es un azul oscuro, la inocencia es un rosado y la malicia un verde militar. así es como he clasificado el color de las lagrimas- Aun atónito por la conversación objeto sin pensarlo - Pero yo no vislumbro esos colores que tu dices ver - Con la permanencia de un brillo que embellecía sus ojos y de manera tierna termino - Innumerable es la gama de colores que se desprenden de cada lagrima emanada y la gran influencia que tienen las emociones en su caudal, lo raro del asunto es que dicho colores no son visibles al ojo humano ya que se elaboran con la destilación de pequeños pigmentos extraídos de las raíces de cada sensación - Inquieto por la resolución de la conversación, se retiro sin pronunciar palabra alguna.

Durante un par de semanas ella no supo de su existencia, al caer una de esas tardes de fin de mes oyó golpear con urgencia la puerta de su casa, agitada por el afán de la visita se apresuro a vestirse con la finalidad de atender al llamado. Al abrir la puerta se encontró su silueta con una gigantesca sonrisa y antes de poder pronunciar alguna palabra, el comento - Encontré la solución para poder observar todos esos colores de los que me hablaste - Y sacando un pequeño trozo de papel del bolsillo de su chaqueta continuo - este papel es el medio perfecto para determinarlos, pues al hacer contacto con una sola lagrima, desplegara claramente el matiz de su procedencia, así podré saber cual es la emoción que emanas – y ella sonrio amablemente.

La curiosidad que él despertaba por su maravilloso invento lo llevo a probarlo en las lagrimas que el emanaba mientras pensaba en ella, lo mas impactante del caso es que el color que se desplegó en el papel, no era ninguno de los que ella ya había clasificado, era un rojo con mucha vida, era tan fuerte su esplendor y su vivacidad que el se tomo el atrevimiento de clasificarlo en una de las mejores sensaciones... el amor.




3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es lo ma bello que te he visto escribir. Llena de una profunda liviandad a mi corazón. Agradezco dejes compartir esta lectura. Un abrazo de admiración.

Spiel Sang dijo...

UAUUUUU!!
Mi conejo se ha vuelto romántico y me encanta. Que buena forma de escribir sobre alguien que encuentra en las lágrimas algo más que el dolor y la tristeza. Me encanta saber que ves el vaso medio lleno!!!

Anónimo dijo...

:o Mis lágrimas son tornasol